domingo, 3 de julio de 2016

Los Segundos –por Óscar García-López

Recuerdo que uno de mis profesores de Historia en la Facultad nos hablaba de la Historiografía como una perspectiva crítica sobre la Historia, o de cómo los propios historiadores analizan e interpretan de una determinada forma.

Si perdemos la perspectiva crítica sobre lo que trasmite la propia historia tendremos una visión sesgada de lo que realmente sucedió en el pasado.

El caso es que parece que en la Historia que nos enseñaron vamos poniendo medallas y atribuyendo grandes hechos a personas “equívocas”, sin desmerecer el hecho de que estas hubieran hecho grandes aportaciones.

Genios a los que yo llamo “los segundos”.

Quizás el más destacado sea el de la Radio.

Si pensamos en el inventor de la radio, lo más probable es que nos venga a la mente Marconi (1834-1937), pero realmente fue una idea de Nikola Tesla (1856-1943).

Marconi patentó el invento de Tesla y ganó un premio Nobel, pero en 1943 la Corte Suprema de EEUU reconoció el mérito de Tesla y le devolvió la patente. Pero da igual: la fama universal la conservará Marconi.

Que estas cosas les pasen a un italiano y a un austriaco no parece que nos afecte mucho.

Sin embargo, tenemos en suelo patrio muchos casos que deberían estar en los altares de la historia, pero están olvidados. Personajes notables que en su gran mayoría resultaron ignorados por el excesivo protagonismo de otros que hicieron cosas parecidas.

Entre ellos destacan Emilio Herrera (1879-1967): inventó el primer traje espacial. O Jerónimo de Ayaz (1553-1613) que patentó la primera máquina de vapor industrial de la historia.


La precursora de los ebooks fue Angela Ruiz Robles (1895-1975) quien creó la primera enciclopedia electrónica.


Fidel Pagés Miravé (1886-1923) conceptualizó y desarrollo la anestesia epidural –¡las mujeres le tendrían que poner en un pedestal!

Ramón Silvestre Verea Aguiar y García (1833-1899) inventó la primera máquina capaz de sumar, restar, dividir y multiplicar.

Mónico Sanchez, contemporáneo de Tesla y de Marconi, inventó el primer aparato de Rayos X portátil, usado en la primera guerra mundial.

Al mallorquín Mateu Josep Bonaventura Orfila i Rotger (1787-1853) se le considera el padre de la toxicología moderna (1787-1853) con su tratado sobre los venenos.


Y para rizar el rizo tenemos el caso de Cosme García Sáez (1818-1874) primero en diseñar un sumergible con anterioridad al archiconocido submarino de Isaac Peral: el “Garcibuzo”, nombre espectacular. Si le hubieran puesto el Enterprise o el Seaquest…¡dónde habría llegado!


Tenemos muchos más casos en España. Sorprendentemente, muchos de esos grandes personajes fueron autodidactas, algo que siempre me dejará fascinado.

Hay que ser muy inteligente para llegar a estos niveles de inventiva.

Está claro que los españoles no sabemos “vender  bien nuestro ingenio y que nuestras grandes aportaciones se quedarán reducidas en muchos casos al imaginario colectivo como inventores de la siesta, de la fregona y del chupa chups.

Nada más lejos de la realidad:

¡Somos un país de primera! ¡Viva España!

Para terminar, y siguiendo con los segundos, ahora que estamos con el tema del Brexit y los nacionalismos, resulta muy curioso ver un mapa de Europa en el que se muestra en cada pais cual es la segunda nacionalidad mayoritaria.

Esta claro que la política y la economía tiene su mayor impacto en los ”segundos”, tan ocultos como nuestros grandes inventores.



¡Que pasen un feliz verano!

1 comentario:

  1. Querido Óscar: excelente reivindicación. Buena falta hace. Las recientes estadísticas del CIS nos dicen que casi 7 de cada diez personas viven de espaldas a la cultura y a la ciencia:
    http://politica.elpais.com/politica/2016/07/06/actualidad/1467810409_519474.html
    El avance de la humanidad sigue siendo responsabilidad de un puñado de personas como las que mencionas en tu post.
    Habría que reconocerles su contribución con mayor asiduidad y humildad.
    Saludos, R

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