domingo, 22 de noviembre de 2015

¿Qué o quiénes están acabando con la Universidad actual? –por José Carlos Maguiña


Esta fue la interrogante principal que aglutinó este último año a un compacto grupo de  especialistas de diversas disciplinas científicas, de entre los participantes del proceso de revisión y acreditación de las universidades peruanas. Aquella pregunta planteada en una serie de conversatorios tiene como objetivo final darle forma a un ensayo conjunto titulado “El futuro de la Universidad” que será publicado en 2016.

Nos planteamos  cuatro etapas: 1) Análisis de los hechos históricos, 2) Análisis de la data medible acumulada, 3) Análisis de las alternativas vigentes al 2020, y 4) presentación/análisis de propuestas sobrevivientes y/o nuevas al 2020.

Este es el primer avance del primer tramo.

La Universidad actual (UA) está terminando una etapa –y tal vez tal como se encuentra, está tocando a su fin—con el ocaso de los medios de comunicación e intercambio de información analógicos, tradicionales. Los que pervivieron desde la invención de la imprenta, allá por 1440 con Gutenberg y la invención de los tipos móviles, masificando el uso de los contenidos escritos e impresos, hasta hoy. Ese modelo de compartir información ha evolucionado a medios digitales, en la nube, actualizables, de corta duración, enfocados en la imagen y teniendo como protagonistas no a las ideas, sino a los hechos. La ciencia factual en su mejor despliegue.

Y en ese escenario, la UA está en franco retiro, desarmada, sin muchos argumentos que ofrecer. Las propuestas que la sustituyen son pocos, y endebles pero ya han salido a disputarle el lugar y el negocio: por correspondencia a fines del siglo XIX, Multimedia desde 1960 con la Open Univ. British, Telemática TIC desde los 90´s, y on-cloud con los Mooc´s, mientras siguen apareciendo nuevas modalidades, ahora con la explosión de las apps.

Los tópicos que atraviesan de manera directa a este asunto son variados, distintos y poderosos: Fines, usos, metas, características, datos, hechos, ideas. Aplicables a casi todos los campos álgidos de estas mismas sociedades y especies: Política, desarrollo, democracia, sostenibilidad, etc. etc.

La Universidad como tal es aún un instrumento de desarrollo de las sociedades humanas organizadas, y desarrolladas; en contadas excepciones. En la mayoría de los casos, no. Pues en estos últimos casos, es un negocio, un simple y pedestre negocio. Despojado de toda la esencia que Platón y subsiguientes propusieron: la Universidad como herramienta de difusión y debate de saberes, para mejorar a las sociedades. O como en su vertiente proactiva lo propone Rafael Rangel Sostmann (1) en su libro “Universidad 2.0” que se debe recuperar el concepto de una universidad aspiracional, por esencia. Por otro lado, el proceso iniciado con la Declaración de Bolonia no suma suficientes factores de ruptura, tales como la innovación universitaria, según Altbach  y Salmi (2).

De esta situación ¿Qué hubiera imaginado y dicho Platón fundador de la Academia, en el demo de Kolonos, a un kilómetro al noroeste de Atenas, allá por el 384 a.C.? De seguro que se espantaría y preguntaría por las razones. Y por ello, en el contexto peruano nos dimos a la obra de debatir las razones y las posibilidades de la Universidad actual, en un contexto altamente conectado y cambiante en cortos períodos de tiempo. Y nos sumergimos en la dispersión de los análisis y resultados educativos, financieros, teóricos, consultivos, producidos en los últimos 20 años y concordables con la legislación actual. Dio como resultado un primer informe con una primera respuesta a aquella pregunta ¿Qué o quienes están acabando con la Universidad actual UA?

A LA EDUCACIÓN UNIVERSITARIA PERUANA ACTUAL LA ESTÁN MATANDO, ANIQUILANDO, ACABANDO SUS PROPIOS USUARIOS" (*)

* SUS PROPIOS USUARIOS son: los propietarios, los funcionarios, los docentes, los educandos, los empleados y los suppliers.

LOS NÚMEROS HABLAN POR SÍ MISMOS (Nótese el protagonismo de los usuarios):

A. 75% es el número que marca la ausencia de Investigación. (La investigación NO la hacen las autoridades, ni se da por ley. La deben ejecutar/realizar los usuarios).
B. 83% es el número de universidades sin procesos de estándares de calidad. (Esos estándares NO los determina la Universidad; son producto del proceso y evolución de sus protagonistas).
C. 92% de los cursos y carreras no se han renovado en los últimos 50 años.
D. 97% de los funcionarios y docentes universitarios no son profesionales de carrera.
E. 99% de universidades privadas no han cumplido con sus procesos de acreditación.

Y estos sólo son los números que corresponden a las universidades privadas (UPds). Imagínense los de las universidades públicas (UPas). Preocupante, ¿verdad?

VEÁMOSLO EN ROI, con los siguientes números:

F. 47% es el número de ganancias sobre la reinversión de UPds, año 1990.
G. 68% es el número de ganancias sobre la reinversión de UPds, año 2000.
H. 78% es el número de ganancias sobre la reinversión de UPds, año 2008.
I. 95% es el número de ganancias sobre la reinversión de UPds, año 2013.

Lo que evidencia que en tan sólo los últimos 20 años las ganancias de las UPds se han centuplicado. Teniendo en cuenta que el grueso de sus utilidades ha ido a parar a no sabemos dónde, pues sólo re-invirtieron mínimas cantidades para seguir con el negocio.

Sí. Un negocio. La universidad es un negocio -pese a quien le pese- las UPds aquí y en Rusia, o en China o en el paraíso; son un negocio. Pero hay negocios y "negocios" (y me viene a la memoria el reciente crack del "negocio" de millones de millones de Wolkswagen).

En resumen, a la Universidad peruana actual LA SIGUEN ANIQUILANDO sus propios usuarios.

Despleguemos las estadísticas arriba mencionadas:

¿Los propietarios la están acabando? Sí, pues el 99% de dueños de UPds no están cumpliendo con los estándares y procedimientos de la nueva ley vigente (SUNEDU). Y, por el contrario, la están saboteando (Juicios desde la ANR y desde el Congreso).

¿Los funcionarios la están aniquilando? Sí, pues el 97% de funcionarios de UPds no cumplen con los estándares y procedimientos de la nueva ley vigente. No son especialistas, desconocen los procesos y estándares globales con los que deben competir; y especialmente, no han perfeccionado sus propios escalafones. Los que no existen. ¿Un ejemplo? Es casi como hablar de la gestión de un ministerio, o de la SUNARP, los que son feudos copados por amiguismo, clientelaje y... otras perlas.

¿Los Docentes la están matando? Sin palabras, casi. (Pues Perú -y otro país mesoamericano- es el único país del mundo cuyo sindicato es el más grande opositor a las mejoras en su sistema educativo).

Y NOS PREGUNTAREMOS TAL VEZ ¿QUÉ HAY DE LOS AGENTES EXTERNOS A LA UNIVERSIDAD ACTUAL? ¿ACASO ELLOS NO TIENEN RESPONSABILIDAD, NI CULPA? Ni el Estado, ni el mercado, ni los entes regulatorios, ni la ley misma, o su brazo, la justicia. No han podido hacer nada. Hasta la SUNAT no puede, ni tiene los elementos para ir contra ella y hacerla más transparente. No, pues una sencilla razón es la que lo hizo posible: "Autonomía universitaria". Y tras ese velo, la universidad peruana actual es un feudo-negocio que ha permitido el estado universitario actual. O sea, producir los números que, a grandes rasgos, explican mi respuesta: SUS PROPIOS USUARIOS LA ESTÁN ANIQUILANDO.


¿PERO, CÓMO ESOS GRANDES NÚMEROS Y GANANCIAS PUEDEN PRODUCIR QUE SE ANIQUILE EL NEGOCIO? Simple, mi querido Watson. Sólo a ti se te ocurre que LA UNIVERSIDAD ES UN BIEN COMÚN, ACCESIBLE Y UNIVERSAL.

Pues no. En la práctica (donde los que dirigen el chiringuito son los dueños de negocios y sus empleados los políticos) no sucede así. Los dueños de UPds sólo ven la cuenta de resultados a diario. (¿Sabías que en medio de esta crisis global que se avecina, el único negocio formal en el Perú que sigue creciendo a pasos agigantados, es el de las UPds?). Y a pesar de todo eso, los propios dueños la están aniquilando. En menos de 5-10 años habrán matado la gallina de los huevos de oro. Y ojo al detalle: No habrá sido culpable la tecnología -que ése es otro cantar- sino que habrá sido responsabilidad y codicia, y ceguera de los propios usuarios.

La Universidad actual está entrando en crisis, ante una verdadera “avalancha” advertida en 2013 por Barber, Donelly y Rizvi (3).

¿Y TAMBIÉN LOS EDUCANDOS?

(A-B-C) INCLUSO LA ESTÁN ANIQUILANDO LOS MISMOS EDUCANDOS. Los números de arriba: 75%, 83% y 92% se siguen produciendo por la nula iniciativa de los educandos: Nula investigación, bajísimos estándares de calidad, y carreras descontinuadas... que los educandos permiten, y propician. Un ejemplo 2015: En los resultados de las encuestas, siendo preguntados (graduados de empresariales):

UNA MUESTRA DE PREGUNTAS A POSTGRADUADOS: ¿Desde tu percepción, qué puntaje le pondrías a la UPd-1? ¿y a la UPd-5? (ambas figuran en el ranking latinoamericano)
El 85% le fue a la UPd-5, y escasos 12% a la UPd-1 (el restante 3% no sabía, o no decidía).
Y aquí viene el detalle: ¿Por qué el usuario-educando graduado universitario le da más crédito a la UP-5? Sencillo. Respondieron:

- "Porque tiene más peso" (y re-preguntados sobre el "peso" respondieron:
- "Tiene más prestigio").

Lo trágico es que esas mismas universidades tienen resultados de investigación inversos a su posicionamiento de marketing, evidentes en evaluaciones de rango internacional (¿quién dijo PISA?).

ES EVIDENTE. LOS MISMOS EDUCANDOS POST-GRADUADOS no estudian, ni se perfeccionan para aprender; sino... para "tener peso" y ser "de la más prestigiosa". Lo demás no importa.

La Universidad actual está perdiendo empuje, tal como se refleja en el informe 2013 Global University rankings and their impact, de Rauvargers (4), comparado con el informe previo de 2010. En resumen: el problema de la Universidad clásica, actual, está cantado y parece irresoluble. No así el de la Universidad futura, que recién está por nacer.

En un contexto donde el ROI del negocio educativo manda, mientras el nivel y los estándares siguen descendiendo... ¿QUÉ HACER?

Los datos históricos indican que estamos ad-portas de nuevos modelos y metodologías de compartir conocimientos. Pero donde "lo más difícil de trabajar con un hipopótamo no es su corpulencia, sino su tozudez".

Pues a mirar más allá del hipopótamo. E ir tras las siguientes tres etapas: a) análisis de la data acumulada, b) de las alternativas existentes, y c) presentación de nuevas propuestas.

Referencias:
1.     Rafael Rangel Sostmann, "Universidad 2.0"  http://goo.gl/jPCJKc

2.     Altbach y Salmi. Is there a ‘special sauce’ for university innovation? http://goo.gl/4Kuf2n
3.     Michael Barber, Katelyn Donnelly, Saad Rizvi. An avalanche is coming: Higher education and the revolution ahead.  http://goo.gl/49CCZ1
4.     Andrejs Rauvargers. Global University rankings and their impact. http://goo.gl/RvZQok

2 comentarios:

  1. Muy interesante JC. Tu post destila pesimismo, por un lado, pero, por otro lado, se aprecia la energía necesaria para regenerar el sistema. Tu perspectiva es moderna y renovadora, pero, a la vez, es difícil ver cómo se puede luchar contra el establishment. Especialmente cuando se cuenta con la complicidad del usuario. Como dices, ese usuario busca un título, y, según parece, el aprendizaje le importa bastante menos. ¿No crees que sería mejor estrategia evitar perder el tiempo criticando al establishment para centrarse en ofrecer algo distinto que supere el pasado sirviéndose de los avances actuales? Saludos cordiales, R

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  2. .

    Tienes toda la razón Roberto; estamos enfocando nuestra energía en identificar y promover iniciativas que funcionen acorde con la época.
    Pero esta fue la primera etapa del proceso: Análisis de la data histórica.
    Voy a seguir compartiendo los subsiguientes pasos del proceso, hasta la publicación del ensayo-libro, ojalá ya con las primeras propuestas en marcha.
    Gracias por tus recomendaciones; y ser una fuente constante de referencia profesional e intelectual. Un abrazo.
    .

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